martes, 31 de octubre de 2017

LO ESPECTRAL

Salimos por detrás del Landesmuseum y, a través de un parque, nos dirigimos hacia la colina del vino (Weinberg), donde habían reedificado la casa de los hermanos Grimm para la ocasión de Documenta 14. Definitivamente no gana uno para sobresaltos, le comenté a Duarte al oído, pues en ese momento una guía contratada por un grupo de japoneses se estaba explayando sobre la presencia de los hermanos Grimm en la muestra de lo último en arte contemporáneo en Kassel. Dicho así de corrido pudiera parecer que es el guión mismo de una instalación. Y es que probablemente todo lo que nos rodea en el mundo actual sea ya una instalación, no espectacular, sino como dice Martel una instalación espectral. “En la era digital - dice Martel - el espectáculo se convierte en algo mucho más invasivo que un show al que podemos asistir con borreguil pasividad. Leales a los emergentes ideales estéticos de la interactividad y la inmersión en la realidad virtual, nos hemos convertido en participantes activos en nuestro propio mundo ilusorio. Hemos pasado de lo espectacular a lo espectral.” 

La presencia de los hermanos Grimm en Documenta hizo que me diera por pensar que, allí delante de mi, no era ajena a esta mutación en marcha. Fueron profesores universitarios en la ciudad de Kassel, aunque son mundialmente conocidos por su obra literaria. Agrupada entorno al título genérico de Cuentos de hadas, que esconde bajo su significación inocua toda una trayectoria abyecta, me pareció una provisional y aceptable explicación del por qué de la presencia de los Grimm en aquel bosque. Definir hoy lo espectral como la infantilizacion de lo adulto más que la represión adulta de ayer sobre la espontaneidad infantil, me pareció una manera oportuna de traer a los Grimm al ámbito de nuestra sensibilidad, llamada, postmoderna, si aceptamos con los historiadores que ellos formaron parte del primer Romanticismo alemán, que es lo mismo que decir que sus historias formaron parte de la fundación de la modernidad. Según Wikipedia, Los 210 cuentos de la colección de los Grimm forman una antología de cuentos de hadas, fábulas, farsas rústicas y alegorías religiosas. Hasta ahora la colección ha sido traducida a más de 160 idiomas. Los cuentos y los personajes hoy en día son usados en el teatro, la ópera, las historietas, el cine, la pintura, la publicidad y la moda. Los ejemplares manuscritos de Cuentos para la infancia y el hogar propiedad de la biblioteca de la Universidad de Kassel fueron incluidos en el Programa Memoria del Mundo de la Unesco en 2005. Tras la Segunda Guerra Mundial y hasta 1948 estuvo prohibida la venta de los cuentos de los hermanos Grimm en la zona de ocupación inglesa, ya que los ingleses los consideraban como una prueba de la supuesta maldad de los alemanes durante la guerra.

Continúa Martel, “El término espectral denota tanto el concepto del espectro luminoso - la disposición de luces y colores que caracteriza la disposición exterior de nuestro paisaje hipermediático - como la noción de fantasma, esto es, el muerto que aún se cree estar vivo. Cuando la representación de la luz es tan omnipresente que llega a eclipsar otras sensaciones directas, perdemos algo más que nuestro sentido de la perspectiva: empezamos a perder nuestro sentido del yo. El medio vital que se nos ofrece hoy en día está casi exclusivamente compuesto por espacios codificados, objetos de diseño, escenarios de eventos e interfaces concebidos para provocar en nosotros respuestas concretas.” 

¿Qué hacía yo en Kassel con aquellos pelos y estas ideas en la cabeza? ¿Había entrado ya en en el alma de Documenta o todavía estaba mareando la perdiz dando vueltas por sus alrededores? ¿Tenía la muestra algo parecido a lo que sea eso que llamamos alma? Allí en la reconstrucción de lo que fuera la casa de los Grimm habían alojado algunas obras. En el hall de entrada la luz inundaba todo, entraba por los ventanales del fondo y por la claraboya que se intuía en el hueco de la derecha. En el fondo unos tronos de colores eléctricos parecían querer vestir el bosque de ciudad. En una sala se han registrado voces en diferentes idiomas, y unas líneas verdes horizontales en la pantalla se mueven según los impulsos, suben y bajan y se ondulan con mayor o menor rapidez y altura, y las voces se convierten en danzarines, lo que dicen quizás no importara tanto. No esperamos al final, quizás también la lengua estaba entre los danzarines, dijo Duarte nada más salir al exterior.