martes, 28 de enero de 2020
AUSCHWITZ 75
“La angustia de vivir permanentemente al filo de la muerte, desalojaba cualquier atisbo de autoestima o fraternidad. Las interminables selecciones, el hacinamiento, el trabajo esclavo, el olor a carne quemada de los crematorios, las enfermedades, la desnutrición, las torturas, el terror psicológico, no eran un simple cúmulo de calamidades, sino las estaciones de una estrategia concebida para deshumanizar a las víctimas. Como apuntó Victor Klemperer en LTI. Lengua del Tercer Reich, se reinventó el lenguaje para excluir del género humano a los judíos, los gitanos, los eslavos, los homosexuales, los testigos de Jehová, los disidentes políticos, los discapacitados y otras minorías. El proyecto de exterminio se encubrió con el eufemismo “Noche y niebla” para dejar muy claro que todo acontecía en los sótanos de la historia. Los inmolados ni siquiera merecían una nota a pie de página. Eso no significa que la Shoah pasara desapercibida.”