“No existe documento de cultura que no sea a la vez documento de
barbarie”. Walter Benjamin.
“Busco la región crucial del alma donde el mal absoluto se opone a la
fraternidad”. Jorge Semprun. In memoriam.
“Nuestros sueños no caben en vuestras urnas”. De un indignado actual.
¿Es el descrédito de la democracia, propia de la abundancia del mal
llamado estado del bienestar, la que produce esta última y sospechosa
aseveración? ¿O es el fruto de un exceso de indignación?
Las palabras de WB y de JS ponen a dios y al diablo delante. Vienen de
tiempos, igualmente de descrédito de la democracia, pero llenos de horror
y miseria. Las del Indignado, con despreocupda ignorancia, no
dejan hueco a otra cosa que no sean sus sueños, sus buenos sueños, claro esta. Vienen de tiempos en los que se creía que la subvención era imperecedera. Otra cosa hubiera significado la
frase: “nuestros sueños son incapaces de poner a todos delante de las
urnas, papeleta en mano”. Palabras que no negariann a las de WB y
JS, sino que las colocarían en unos tiempos sin tanta furia. Mas calmados e irónicos.“
Y sin embargo sigo viendo a la indignación como una inexorable fuerza
propia de nuestros sueños. Lugar donde anidan la madre de todos los
cambios que en el mundo han sido. Junto a la imaginación forman las
puntas de lanza que nos hacen tener la percepción primigenia y mas
cabal del mundo que nos rodea. Después de tres semanas en las que
han dado a conocer al mundo su suprema y sensata indignación, quizá sea tiempo
de ver lo que da de si su imaginación. Usted ya sabe