Tocaba volver a empezar y era lo que más me costaba. Nunca entendí en clase lo que el profesor repetía sin desfallecer: “todo relato comienza in media res, en la mitad de las cosas.” La vida no es muy diferente, continuaba, nos dan una vida en propiedad pero heredamos un mundo que existía antes de que nosotros naciéramos y continuará cuando nos hayamos muerto. Luego nuestra existencia se encuentra siempre ahí, in media res. Es la herencia lo que nos hace humanos, no la propiedad. Cuando dijo estas palabras abandoné la clase, me tocaba ganar mi vida desde el medio.