LENGUAS EN LOS ÁRBOLES
Ensueña el sedentario
en las viajeras nubes
ser nómada algún día,
dejarlo todo atrás
en un momento
y no volver la vista.
Es como ese árbol
de profundas raíces
que solitario se alza
—libre es su copa—
en lo alto de una peña
fecunda por un águila.
No tiene compañía.
Vilanos que se arriesgan
a un breve vuelo,
un ave que se arroja
desde una rama,
habitan en sus sueños.